jueves, 12 de febrero de 2015

Aparejado

Antes de aplicar el aparejo en algunos casos, se realiza un suave lijado de las superficies, eliminando pequeños defectos, es necesario limpiar la carrocería para dejarla libre del polvo del lijado.

El aparejo se aplica con el objeto de conseguir una superficie uniforme que garantice, además, la adherencia de las pinturas de acabado. La aplicación es electrostática, generalmente, por lo que el aparejo se atomiza en finas gotas con carga positiva, que son atraídas por la carrocería mediante campos eléctricos, al conectar la carrocería al polo negativo. Mediante sistemas aerográficos manuales, se puede llegar a huecos o zonas de difícil acceso para los robots. El espesor de la capa suele ser de unas 30 micras.

Finalmente se seca la carrocería, a temperaturas entre 140 y 160ºC de 5 a 20 minutos. En algunos caso es necesario una nueva limpieza, que suele realizarse con túneles de secado y rodillos especiales, fabricados con pluma, que eliminan las partículas de polvo generadas en el lijado.

Aplicación del acabado


Al igual que el aparejo, la pintura de acabado suele aplicarse mediante sistemas electrotáticos. En algunos casos, por la dificultad de acceso de los brazos de los robots, se completa elproceso con aplicaciones manuales.

Los sistemas de acabado suelen ser los denominados monocopa y bicapa, caracterizados por el número de productos que se aplican. En el acabado monocapa, se pulveriza un único producto, que proporciona el color y el brillo, mientras que en los bicapas se emplean dos productos: el color y el barniz trasparente, que dara brillo. A pesar de utilizar dos productos en estos procesos, no es necsario secar el primero (el color) para aplicar al segundo, sino que basta con la evaporación de los disolventes para poder dar el barniz.

El espesor de la capa de color es de, aproximademente, 45 micras en monocapas y de sólo 15 en bicapas, ya que en estos últimos la capa final de barniz contará con unas 40 micras.

La pintura monocapa y el barniz se secan en hornos, durante unos diez minutos, a temperaturas que oscilan entre 120 y 160ºC.


De esta forma, quedará la capa de color es de, aproximadamente, 40 te unos diez minutos, a temperaturas que oscilan entre 120 y 160ªC

De esta forma, quedará completado el proceso de pintado, mediante el cual se ha conseguido que la carrocería obtenga una protección anticorrosiva que puede superar los 10 años además del buen aspecto estético. El espesor de todas las capas y tratamientos aplicados puede estar entre 90 y 135 micras.

Tras completar el proceso, se realiza un control de calidad, que garantizará la inexistencia de defectos o daños en la capa de pintura. Si fuese necesario llevar a cabo alguna correción, existen las denominads líneas hospital, en las cuales, como en un taller de reparación, puede repintarse aquella zona o pieza que no haya alcanzado el nivel de calidad exigido.


Pintado de reparación


El proceso de pintado en reparación tiene por objeto devolver al vehículo los niveles de protección y embellecimiento que tenía originalmente. En función de los daños ocasionados, en este proceso podrá conllevar la sustitución de piezas o su reparación. En ambos casos, deben aplicarse, posteriormente, diferentes productos de pintura.


Los pasos del pintado en reparación y los productos utilizados son equivalentes a los del proceso de fabricación, si bien, se adecuarán a las condiciones del vehiculo y del taller, se procederña a la limpieza y desengrasado, enmasillado, se darña el acabdo.

Limpieza y desengrasado.
Se procede al lavado y desengrasado para conseguir una superficie libre de impurezas, que garantice la adherencia de los distintos productos y la canlidad del proceso.

Enmasillado.
Para nivelar las superficies reparadas, se aplican las masillas de relleno. Estos productos cubren las irregularidades del sustrato.
Para asegurar la calidad del proceso, no se admiten, ni son recomendables, reparaciones que requieran espesores de masilla de más de 500 micras. En general, se aplican capa mucho más finas.
El enmasillado no se realiza cuando la pieza es nueva, pues los recambios han recibido los primeros procesos de pintado en fabricación, hasta la cataforesis, presentando una superficie uniforme. Si, por cualquier razón, se hubiesen dañado, seria necesario reparar y, por tanto, igualar y proteger la superficie del mismo modo que se haria con una pieza reparada.
Este es el único paso que no tiene correspondencia con el proceso de fabricación, al producirse como consecuencia de la propia reparación.
La masilla se aplica, generalmente, con espátulas, aunque también se puede realizar a pistola, cuando se trata de masillas para grandes reparaciones. Tras su secado, es necesario lijarla para igualar la superficie y favorecer la adherencia de los siguientes productos de pintura.

Imprimado.
La imprimación actúa como protección anticorrosiva. Se aplica sobre aquellas zonas en las que, tras el lijado de la masilla, haya aparecido metal. También es posible aplicar imprimaciones antes del enmasillado, para incrementar la protección.


En las piezas nuevas no se necesaria la imprimación, al haber recibido todos los tratamientos protectores hasta la cataforesis. Si, por causa de la reparación, se hubiesen eliminado las capas de protección, habria que aplicar imprimación, antes o después del enmasillado, si aparecen zonas de metal al descubierto.
El proceso continúa sin necesidad de secar la imprimación. Bastará con la evaporación de los disolventes, siguiendo un método, denominado húmedo sobre húmedo, que evita el secado y el lijado.

Aparejado.
Para aislar las pinturas anteriores y facilitar la adherencia de los siguientes productos, se aplica el aparejo. Su espesor está condicionado por el tipo de reparación, con el fin de que se nivelen adecuadamente las superficies.


Los tiempos de secado dependen del esperos aplicado, del tipo de producto empleado y de la temperatura. Como indicación, para espesores inferiores a 200 micras, los tiempos de secado serán de 30 min, a 60ºC. Con aparejos especificos también se puede realizar un proceso húmedo sobre húmedo, de forma que no es necesario secar el aparejo, sino que basta con dejar evaporar los disolventes.
Una vez seco el aparejo, debe realizarse un lijado para facilitar la adherencia de la pintura de acabado y mejorar la superficie.
Con la posterior limpieza y desengrasado se completa la preparación de superficies.

Aplicación del acabado.
El acabado puede ser monocapa o bicapa, siempre ha de conseguirse la igualación del color de la zona reparada con el resto del vehiculo. Junto a la correcta elección del color, intervienen otros factores, como la presión y la distancia de aplicación.

No hay comentarios:

Publicar un comentario